La ciencia ha demostrado que los "homínidos" han vivido en este planeta durante un tiempo muy largo. También se ha demostrado que el Homo Sapiens (Cromañón u hombre moderno) no. Nuestros antepasados llegaron aquí como prisioneros interestelares hace aproximadamente cincuenta mil años. Al igual que nuestros antepasados, somos propensos a la conducta delictiva y la enfermedad mental. Es una parte ineludible de nuestra naturaleza humana básica. No es culpa nuestra, sino más bien del código genético desviado.
No hay ni un solo ser humano que este libre de pensamientos violentos, lujuriosos, vengativos, de robo y/o criminales. Los horrores que los humanos han experimentado en este planeta son casi siempre causados por la humanidad. Los seres humanos mienten, roban, engañan, violan, asesinan y contaminan. Cuando ya no pueden ejercer más dominio sobre la tierra y de los animales, ellos victimizan a su propia especie. Somos una amenaza horrible para nosotros mismos, para todas las criaturas de este planeta y de la civilización interestelar.
La Tierra fue elegido para convertirse en un planeta prisión debido a su ubicación remota, y la capacidad de soportar las formas de vida de los homínidos. Cada "raza" de nuestros antepasados fueron colocados en diferentes continentes, seleccionados por similitudes con sus antiguos ambientes climáticos. A pesar de que las razas variaron en el lenguaje, tamaño, forma y color, todos eran Cromañón.
Aunque reducida a un estado primitivo antes de la inserción, nuestros antepasados no sólo sobrevivieron, prosperaron. De inmediato comenzaron a dominar todo lo que entró en su camino. Y, la repentina apariencia terrestre del hombre moderno fue en una escala tan grande, que permitió a los Cromañónes conducir a los neandertales, que habían estado en la parte superior de la cadena alimentaria de la Tierra durante más de 200.000 años, hacia la extinción mundial en tan sólo unos pocos miles años.
Antes de ser asentados en la Tierra, nuestros antepasados fueron despojados de todo recuerdo de su vida anterior. Se creía que si los prisioneros lograban sobrevivir, ellos permanecerían en un estado primitivo, co-existiendo mediante la construcción de relaciones, y posiblemente incluso el cruzamiento con especies homínidas nativas de la Tierra. Era una creencia que fue probado muy incorrecto. Mientras que por un corto tiempo parecía como si el exilio Cromañón se estaba desarrollando según lo previsto, dentro de 1.000 años, informes comenzaron a inundar de que descuidos graves quizás se habían hecho. La suposición de que los prisioneros se mantendrían en un estado primitivo se hizo añicos cuando nuestros antepasados comenzaron a crear un microcosmos de la civilización interestelar. La Tierra, por primera vez en su historia, se convirtió en testigo del arte, la arquitectura, la ganadería, la agricultura, las lenguas escritas, lsa matemáticas avanzadas, la tecnología, las leyes, la religión y el gobierno. También se convirtió en el testigo de las atrocidades del hombre moderno.